de Laura Dariomerlo«… En verdad es algo trágico saber que jamás hará uno algo lo suficientemente irritante como para ser reprendido o marginado, que es lo que ella ha soñado siempre. Nunca nadie la dejará sola, o la abandonará, o dejará de hablarle o de amarla, por el simple y sencillo hecho de que es irremediablemente encantadora. Ni siquiera los años han mejorado las cosas para ella. El tiempo la trata cada día mejor, como si fuera un escultor que se acerca a su obra sólo para mejorarla. No la odio, pero a veces, la envidio con ferocidad y deseo que muera…»
Las mujeres de estos cuentos recorren caminos diversos, peculiares, mágicos. Encrucijadas, elecciones y momentos milagrosos que se convierten en puntos articulares de sus vidas. Son humanamente diferentes, profundamente distintas, pero en algún punto secreto se conectan. Personajes interesantes por su cercanía, por la familiaridad de sus dilemas y conflictos, se convierten en heroínas de estos relatos fantásticos, poniéndonos frente a nuestras propias dudas y dejándonos con la certeza de que somos tan maravillosamente únicos como ellas.
13 historias de mujeres bizarras es una buena oportunidad para redescubrir todo lo especial y misterioso que reside en nosotros.
LA AUTORA
María Laura Dariomerlo nace en Huinca Renancó, pueblo del sur de la provincia de Córdoba, el 25 de noviembre de 1975. Allí completa sus estudios secundarios y da sus primeros pasos en las letras, ganando algunos concursos regionales y escolares. A los dieciocho años parte, para radicarse en Buenos Aires. Dedica sus primeros tiempos en la Capital Federal, a la danza contemporánea, pero en 1999, da un vuelco a su vida ingresando, para completar sus estudios, en la Escuela Profesional de Cine de Eliseo Subiela. Allí se abren para ella los mundos maravillosos de la luz y la palabra.
13 historias de mujeres bizarras es su primer libro de cuentos y esconde una fuerte influencia cinematográfica y un importante contenido visual. Cineasta, actriz, bailarina y escritora, Laura Dariomerlo pretende que encontremos en las mujeres de sus cuentos, partes importantes, componentes extrañamente familiares, de nosotros mismos.
